La mitad de los plenos municipales que se convocan los últimos jueves de cada mes se celebrarán en jornada de mañana. Esta fue una de las primeras medidas que adoptaba el pacto de gobierno entre PP y C’s, cerrando así la puerta a la participación ciudadana, ya que al tratarse de una sesión que se celebra durante el horario más laboral, posibilita que no acudan los vecinos al mismo.
Y ambas formaciones políticas que conforman el gobierno municipal, han logrado su objetivo, que no era otro que quitarse la presencia de vecinos en los plenos. El primer pleno de la nueva legislatura ofreció una imagen desértica de la zona destinada al público, donde solamente estaban presentes las dos personas de la prensa local vetadas por el gobierno y los dos cargos de Ciudadanos, contratados a dedo para controlar las áreas de prensa y comunicación, cuya exigencia llevó al alcalde a despedir a la anterior responsable de prensa, Raquel Santos, a cambio de mantener la alcaldía.
