tras el golpe de timón, España ha quedado en manos de lo que queda del PSOE, PODEMOS y Bildu, y con un president de la Generalitat que se explaya en términos preocupantes tras “Llamar a los castellanohablantes en Cataluña “bestias con forma humana que destilan odio” y decir que sufren “un pequeño bache en su cadena de ADN”. Fuente: El País.
Frente a esta situación y, como oposición, encontramos las ruinas del PP consumido en las llamas de su propia corrupción y un partido, Ciudadanos, que se ha convertido en la expresión más abierta del liberalismo sin restricciones.
En definitiva, los dos polos opuestos, extremos, que de nuevo irrumpen en escena, deben conducirnos a recordar el más inmediato pasado, con el fin de evitarlo y no pretender repetirlo.
El hundimiento de la clase media y la crisis de la socialdemocracia, ya irremediable, son los ejes sobre los que debe gravitar una alternativa que reconduzca la situación o, de lo contrario, el camino en el futuro seguirá conduciendo hacia las profundidades del abismo.
Rubén López